Antes de dar este paso, que puede ser traumático y que puede influir a terceras personas, como pueden ser los hijos de la pareja, debes pensar en otras soluciones posibles, porque muchas veces, estas crisis de pareja son una acumulación de malos entendidos, falta de comunicación o monotonía, algo que tiene solución, siempre y cuando los dos queráis poner de vuestra parte.

Cierto es que cuando nos casamos, todos creemos que el nuestro será un matrimonio feliz, pero el día a día, problemas exteriores, el trabajo, la monotonía o la falta de comunicación, hace que nos metamos en una crisis de pareja, para la que sólo veamos como posible solución el divorcio, que no siempre debe ser el único paso a dar. Hay varios factores que afectan a estas relaciones de pareja, que tienen diversas soluciones:

• Falta de comunicación: sin lugar a dudas, es uno de los problemas más comunes en las parejas que llevan varios años juntos. Al no hablarse de los problemas, de las cosas que molestan o de malos entendidos, estos se van acumulando, llegando en ocasiones a una crisis de la que es difícil salir. Pero la mejor solución es ser sinceros el uno con el otro, y cada vez que sucede algo importante, no dejarlo pasar, pero tampoco “quejarse” hasta del más mínimo detalle.
• Discusiones destructivas: las faltas de respeto, el echar en cara cosas supuestamente perdonadas, el no ponerse en lugar del otro, es otra de las causas de las crisis de pareja, siendo lo más importante en este punto no perderse jamás el respeto, porque una vez perdido, casi no hay marcha atrás. Por esto, es necesario expresar muestras de cariño, no dejar de hacer ver a la otra persona que la queremos y lo importante que es para nosotros.
• Abandono: el trabajo es uno de los elementos que más influyen en los problemas de pareja, sobre todo si uno tiene un trabajo más agobiante y no presta la suficiente atención a la otra persona. Hay otros motivos que pueden llevar a este sentimiento de abandono, como la falta de interés por los asuntos del contrario, que pueden desembocar en crisis de pareja en vacaciones, por ejemplo, cuando se pasa más tiempo juntos. La solución, intentar establecer rutinas o actividades semanales que realizar en pareja.
• Monotonía: sin lugar a dudas, uno de los problemas más comunes en las crisis de pareja, el hacer siempre lo mismo y el haber perdido la ilusión del primer día. Este punto tiene fácil solución siempre que los dos pongáis de vuestra parte, porque el hacer actividades juntos diferentes, simplemente salir a cenar o hacer un viaje, puede cambiar la dinámica de la pareja y no pasar por un divorcio.
• Decepción: otro de los puntos más difíciles de solucionar, cuando uno de los integrantes de la pareja, se da cuenta que ya no está casado con la persona de la que se enamoró. Este sentimiento es muy difícil de eliminar, siendo una de las soluciones intentar ver en “nueva pareja” aquello que veíamos antes o intentar acoplarnos a la nueva situación, aceptando a tu pareja tal y como es, sin intentar cambiarle, expresando sentimientos positivos.

Como ves, estas soluciones requieren de un gran esfuerzo por ambas partes, pero debes tener en cuenta que el divorcio no es siempre la solución a una crisis de pareja, sino que puedes ir por otros caminos, si de verdad ambos estáis comprometidos con la relación.

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No siempre las relaciones pasan por buenos momentos. Por eso, es muy importante que la falta de comunicación en la pareja nunca se dé entre vosotros, pues es uno de los problemas más graves a los que os vais a enfrentar. Tener confianza con tu chico y contaros las cosas reforzará vuestra unión.

Las separaciones temporales hacen que nos sintamos indefensos y desorientados. Repentinamente nuestra autoestima se desvanece y la confianza en nosotras mismas no sabemos dónde ha quedado. Inseguridad, miedo, angustia… estos son algunos de los sentimientos que seguro que estás notando.

Lo más importante en estos momentos es conocer las razones de por qué te pide un tiempo. Puede ser simplemente para aclarar sus sentimientos, donde aunque quieras, no puedes influir. O puede ser por algo que hayas provocado una situación tensa entre vosotros. Sea como sea sólo te queda esperar a escuchar su decisión.

Sigue nuestros consejos sobre cómo actuar en este tipo de situaciones:

• No le agobies. Es difícil separarse de la persona que quieres, pero si te ha pedido un tiempo quizá lo necesite de verdad. No preguntes a todas horas si ya ha tomado una decisión, ni  le llames por teléfono cada dos por tres. Deja que piense tranquilamente, será él quien dé señales de vida pronto. Eso sí, siempre puedes preguntarle cómo está, que note que sigues preocupándote por él. El pasotismo total tampoco es bueno.
• No te pongas a la defensiva. Aunque no compartas sus razones sobre vuestra separación temporal, quieres que lo vuestro se solucione y enfrentándote a él no conseguirás nada. La mentalidad de las personas es muy compleja, y si se siente atrapado y atacado, sólo hará que las cosas empeoren.
• Toma tu decisión. Aunque haya sido él quien te ha pedido un tiempo, tú también tendrás tiempo para reflexionar sobre lo vuestro. Seguramente sacarás conclusiones fuertes. Puede que confirmes que le echas de menos y no puedes estar sin él, o por el contrario, que te des cuenta de que lo vuestro estaba condenado al fracaso. Haznos caso y piensa.
• Intenta remediar los errores. ¿Te has dado cuenta de que has sido tú quién ha provocado esta situación? Seguramente estés muy arrepentida. Hay errores en las relaciones de pareja que no se pueden cometer. Si has sido tú la culpable, no hay nada como pedir perdón a tu pareja y enmendar esos traspiés. Lo que nunca debes hacer es prometer algo que luego no cumplirás, pues tu palabra perderá toda su fiabilidad.
• Piensa en los cambios que vas a hacer en vuestra relación. Debéis aprender a entenderos para que vuestra convivencia sea buena. Adaptaros el uno al otro y ceder ambos por igual sería lo ideal. Dicen que el amor lo puede todo, pero cuando los caracteres están muy enfrentados, el dicho no es del todo cierto.

Cuando tu chico te dé una respuesta sobre lo que ha decidido, pueden ocurrir dos cosas: que haya decidido seguir adelante y daros una segunda oportunidad o que prefiera seguir el camino por su cuenta. En este caso es necesario que conozcas cómo superar una ruptura sentimental y sepas que la vida continúa.

Por último, es normal que no sepas qué hacer cuando tu pareja te pide un tiempo. Sigue nuestras recomendaciones, ya verás como todo vuelve a su curso.

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Todas las parejas, hasta las más idílicas, discuten alguna vez. Eso sí, nuestras discusiones no deben sobrepasar nunca el límite del respeto, ya que si no, nuestra relación estaría abocada al fracaso.

Hay momentos en que las parejas viven una situación de peligro: problemas con los hijos, la casa, la economía doméstica. El éxito llegará si sabemos apoyarnos el uno en el otro. Desde ese momento, la relación saldrá reforzada y preparada para superar más obstáculos.

A continuación te damos las claves para salvar tu relación de pareja si es que la ves peligrar, toma  nota:

• Crisis de los 3 años. Aunque parezca surrealista, está demostrado que todas las parejas pasan por este momento. El enamoramiento va perdiendo fuelle y vemos de una manera más realista a la persona que tenemos al lado. Sus fallos y manías ya no pasan desapercibidas e intentamos cambiarlo. ¿Acierto o error? Probablemente error. Debemos intentar adaptarnos al otro y no cambiarlo. Y llegado a este punto plantéate una cuestión: ¿eres demasiado exigente en el amor?
• Comunicación. Después de un tiempo conviviendo, ¿te has dado cuenta de que ya no habláis como antes y cada uno va a lo suyo? La falta de comunicación en la pareja es una de las peores lacras en un matrimonio. Muestra interés por tu chico y verás cómo serás correspondida.
• Dedica más tiempo a la pareja. En un momento de crisis, el distanciamiento es peligroso. Trata de organizar actividades juntos y disfrutad. Recuerda los primeros meses de vuestra relación y analiza cómo os lo pasabais bien el uno con el otro, seguro que te surgen ideas.
• Relativiza la situación. En un momento crítico, y más en temas relacionados con el amor, nos volvemos tremendistas con cualquier cosa. Es verdad que el tema es importante, pero no te tomes tan a pecho detalles sin apenas importancia. Se trata de normalizar la situación, no de empeorarla aún más.
• Sorprende a tu pareja. Una salida a cenar, un viaje sorpresa… todo vale para recuperar la chispa de la relación. Realizar actividades para salir de la rutina es una buena terapia para olvidar discusiones y malos momentos.
• Relájate en vacaciones. Está demostrado que en época de vacaciones se rompen muchas parejas. ¿Será por el tiempo que pasan juntos sin nada de lo que preocuparse? La época estival está para desconectar  y disfrutar. Sigue nuestros consejos para sobrevivir a una crisis de pareja en vacaciones.
• Dinamiza tu vida íntima. Sal de la rutina y sorprende de algún modo a tu chico. Innova en posturas, cómprate un modelito sensual… en otras palabras, haz que vuelva la chispa entre vosotros. Reconocer cuándo nuestra vida íntima va mal no es tan difícil, así que pon solución a tiempo.

La respuesta a cómo salvar una relación no es tan complicada si la pareja todavía funciona. Como consejo te diremos que nunca dejes empeorar demasiado las cosas para que solucionarlo sea cosa de niños.

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Existen 5 motivos clave que matan cualquier relación y que, a pesar de ser de sobra conocidos, se dan mucho más de lo que pensamos. Y es que, cuando las discusiones de pareja se hacen más habituales que el cariño, algo no va bien.

No dedicar suficiente tiempo a la pareja, caer en la rutina, no hablar o sacar pegas a todo son detalles que poco a poco van apagando la llama del amor. Así que, si quieres recuperar tu pareja, ¡mantente alejada de estas situaciones!

Entonces, ¿cuáles son esos 5 motivos clave que matan cualquier relación? ¡Pasa a la siguiente página!

No tener tiempo para el otro

1.- No tener tiempo para el otro

El trabajo, nuestro ritmo de vida y las prisas son malos consejeros para la relación, y además nos quitan tiempo para estar con la pareja. Es entendible que nuestras agendas están muy apretadas, pero es necesario sacar tiempo para el otro, para dedicar a la pareja. Si este tiempo va disminuyendo con el paso del tiempo, acabará matando nuestra relación, pues es importante hacer ver al otro que sigue siendo especial y fundamental en nuestra vida.

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Mucha prisa o demasiado poca

2.- Mucha prisa o demasiado poca

Comenzar una relación e ir demasiado deprisa o demasiado despacio, siempre nos genera problemas. Se debe avanzar en la pareja de manera firme y constante, sin quedarnos estancados viendo que la relación no evoluciona, o yendo tan deprisa que inculquemos miedo y desconfianza en el otro. Debemos dejarnos llevar siempre poniendo interés en la pareja.

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Caer en la rutina

3.- Caer en la rutina

Este es uno de los errores más frecuentes que matan las relaciones, dejarse llevar por la rutina y no sorprender al otro, acaban con cualquier pareja. Siempre es bueno saber hacer y probar cosas nuevas, sorprender a tu chico y no llevar una rutina extrema que nos haga pensar que la relación ha perdido todo el sentido. ¿No te acuerdas de los primeros meses?

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No todo está hecho

4.- No todo está hecho

Otro de los errores más nefastos en una relación es pensar que en la pareja ya está todo hecho. Y es que, por muchos años que llevéis juntos nunca es tarde para hacer cosas nuevas. Arreglarse para el otro, intentar sorprenderle… En definitiva, no descuidarse pensando que con el otro está todo hecho, porque darás la sensación de que tu chico no te importa, y no es así.

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Críticas, críticas y más críticas

5.- Críticas, críticas y más críticas

Cuando una relación de pareja se basa en críticas, críticas y más críticas, sólo hace que destrozar una relación. Las malas palabras, estar a la defensiva y las discusiones continuas hasta llegar a perder el respeto no hacen ningún bien. En este caso, hay 5 claves para salir de una relación tóxica que debes tener en cuenta, haznos caso.

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Quien más y quien menos, todos hemos tenido alguna relación donde discutir está a la orden del día, sobre todo por cosas sin importancia. Dos personas pueden tener opiniones muy diferentes, pero siempre deben expresarlas gracias al respeto del otro. La comunicación en la pareja es uno de los puntos cruciales, por lo que deberás esforzarte en conseguirla pero sobre todo, en mantenerla.

A continuación te damos las claves para que tu pareja sea un éxito, atenta:

• Tu chico no es un enemigo. Cuando empecéis a discutir cuida tus palabras y el tono de voz con el que las pronuncias para evitar malos entendidos. No ataques e intenta exponer tus ideas de forma clara y tranquila.
• Nada de insultos. Aunque sea en broma, evita los insultos y palabras malsonantes a toda cosa, no harán más que avivar el mal ambiente y conseguir que la discusión vaya a peor. Las ofensas personales y los golpes bajos harán sentir mal a tu pareja, y eso no es lo que quieres.
• Ante todo está el amor. Ten en cuenta que por mucho que discutáis estáis juntos porque os queréis. Algún día viste algo especial en él que te llamó la atención y no vas a perderlo por una discusión sin sentido.
• Respeto, respeto y respeto. No hay palabra más importante en una relación de pareja que esta. Aunque tengáis opiniones diversas mantén siempre un respeto: deja hablar, intenta comprender, expón tus ideas y nunca insultes o manipules psicológicamente. Si superas este límite vuestra relación estará condenada al fracaso.
• Tranquilidad. Antes de empezar a discutir modera tus nervios. Incluso si te ves capaz de perder las formas, debes saber que ese no es el momento adecuado. Espera un tiempo hasta que estés más tranquila para hablar. Si no lo haces, acabarás diciendo cosas que no quieres.
• Hablad del problema. Evitar los temas de desacuerdo no hace más que aumentar el rencor del uno hacia al otro. Coged el toro por los cuernos, las cosas se hablan.
• Busca soluciones. Una discusión para tirarse los trastos a la cabeza y sacar trapos sucios el uno del otro no sirve para nada. Trata de encontrar un punto de acuerdo al problema y poned fin a la discusión juntos lo antes posible.

La afinidad en la pareja es muy importante, no en el sentido de pensar y actuar del mismo modo, sino en de comprenderos y ayudaros mutuamente. Porque no sólo hay que saber estar con una persona en los buenos momentos, los malos nos demuestran realmente quién está a nuestro lado pase lo que pase.

Las discusiones de pareja son normales siempre y cuando no sobrepasemos los límites que te hemos marcado anteriormente. Disfruta de tu pareja y olvídate de peleas por motivos poco importantes, saldrás ganando.

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Se supone que cuando decides formar una pareja con ese chico tan especial, lo haces para que vuestra vida en común supere las expectativas de tu vida en solitario, para tener a alguien con quien poder contar siempre y disfrutar de lo bueno del amor.

Pero, ¿qué sucede cuando los malos momentos eclipsan a los buenos?, ¿Cuando no recuerdas qué fue de aquella relación tan bonita de cuándo comenzasteis a salir? Si te has dado cuenta de que sufres más de lo que disfrutas ojo, estás ante una relación destructiva. Y es que, existen muchas relaciones amorosas tóxicas aunque nos cueste creerlo.

Encontramos muchos tipos de relaciones tóxicas, sin embargo, todos poseen un factor común, la insatisfacción de estar juntos. Normalmente es común que uno de los dos miembros se desviva por mantener una relación que no va a ningún sitio, provocándole tristeza y desgana.

A continuación te mostramos las características de una relación tóxica para que sepas identificarla con claridad:

• Él es el centro de atención. Si se habla de algo, es de sus problemas, su trabajo, sus planes o expectativas. Tú sientes que te quedas relegada en un segundo plano y jamás te pregunta cómo estás, cómo te ha ido el día y siempre quiere tener la última palabra, es un signo muy claro.
• Cada día, una nueva pelea. Sin saber por qué, siempre hay una nueva discusión, incluso por bobadas. Si sólo escuchas críticas y comentarios negativos sobre ti, no estás ante una relación de pareja sana, que se quiere y se ayuda, pero no se destruye.
• Finges delante de los demás. ¿Estás tan harta de que todo el mundo vea vuestra pareja como algo que no funciona? Si delante de los demás finges que te hacen gracia sus bromas de mal gusto, sus comentarios o sus actuaciones para que parezca que lo vuestro va viento en popa, mal asunto.
• Toleras todo por no discutir. Estás tan cansada de discutir por todo que llegas a soportar cosas que nunca jamás hubieras tolerado, incluso aquellas que no cuadran con tus principios. ¿Estás segura de que es eso lo que quieres para el día de mañana?
• Te has acomodado y no puedes salir de este círculo vicioso. Hay veces que tú misma te das cuenta de que lo vuestro no funciona, pero llevas tanto tiempo con él que te ves incapaz de cortar por lo sano y hacer tu vida. Habías hecho tantos planes que el cómo salir de una relación tóxica lo ves imposible.

Hay ciertos hombres de los que debes huir por su difícil personalidad o comportamiento, pero sobre todo, de los hombres violentos, tanto física como psíquicamente.

Dejar una relación tóxica no siempre es fácil, al contrario, pero sí es posible salir de ella. Para empezar recuerda que hay ciertos límites que ni tu pareja ni nadie debería sobrepasar, los del respeto. Cuando esto ocurre, hay que poner los puntos sobre las íes.

Si te ves incapaz de salir de una relación tóxica acude a un profesional que te ayude, en concreto a un psicólogo. Te ayudará a cambiar el rol que has tomado en tu relación y a ver las cosas de diferente manera. Inténtalo, te mereces algo mejor.

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