Cuando llega el verano, nos asaltan las dudas en lo que se refiere a las cremas solares. ¿Cuál es la protección que necesito, ¿cada cuánto tiempo me la doy?, ¿puedo utilizar la crema del año pasado? Y es que, la cada vez mayor preocupación por la aparición de melanomas, hace que por fin nos tomemos este tema mucho más en serio.

Desde la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) nos aclaran todas las dudas acerca de los protectores solares. La primera cuestión a la que hacen referencia es la de la fecha de caducidad y el PAO (Period after openning o periodo después de abierto), algo que no podemos dejar de lado. A ambos términos les deberemos prestar la debida importancia.

En cuanto a la fecha de caducidad, abierto o no el producto, es el periodo hasta donde la crema, y por tanto su protección, es efectiva. El PAO, es la efectividad del producto hasta una vez abierto, haya caducado o no.

¿Es malo utilizar una crema solar caducada?

La respuesta es NO. Realmente, no se trata de un producto nocivo para nuestra piel, pero debes tener claro que habrá perdido eficacia en cuanto a protección, o lo que es lo mismo, no te protegerá de forma correcta contra los rayos del sol. Uno de los errores más comunes, es aplicarnos la crema caducada con más frecuencia, pero aun así, no te dará la protección que esperas. ¿Lo mejor? Desecharla como protector solar y dejarla como crema hidratante.

¿Debo tener en cuenta la textura?

Efectivamente, una crema puede cambiar su olor, color o textura e indicarnos que ya no sirve (habiendo caducado o no). Sin embargo, no nos debemos fiar tampoco cuando teniendo buen aspecto, el PAO o la fecha de caducidad se han cumplido.

¿Influye el fototipo de piel al utilizar una crema del año anterior?

Por supuesto que las pieles más claras, tienen mayor riesgo de sufrir quemaduras importantes si no utilizados el factor de protección solar adecuado. Sin embargo, una piel morena no está exenta de sufrir quemaduras. Por tanto, utilizar una crema del año anterior no es buena idea en ninguno de los casos.

A modo de conclusión, te diremos que el sol puede resultar muy dañino para nuestra piel si no utilizamos la protección adecuada. Del mismo tiempo que te aconsejamos un SPF adecuado a tu fototipo de piel y que deseches las cremas del año anterior, te pedimos que cumplas también los cuidados de la piel después de tomar el sol.

Por tanto, debe quedar muy claro que NO debemos utilizar la crema solar del año anterior como medio de protección contra los rayos nocivos del sol.

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Cuando se acerca el verano, el calor y el sol, lo principal es preparar la piel para el verano. Y uno de los puntos más importantes es la protección solar. Seguro que más de una vez y de dos, has duda sobre el factor de protección que necesitas, ¿verdad? Pues nosotras te vamos a ayudar a elegir bien la crema solar que necesitas.

Para saberlo, lo primero es que conozcas cuál es tu fototipo. Hay seis diferentes y cada uno necesita un factor de protección solar. Para ayudarte con todo esto, lo mejor es que sigas leyendo.

¿Cuál es mi fototipo?

El fototipo es cada uno de los colores que existen en los diferentes tipos de piel. Tiene que ver con características hereditarias, raciales y a la cantidad de pigmentos presentes en la piel. Para saberlo, debes tener en cuenta los siguientes aspectos:

• La aparición de pecas, sobre todo en verano.
• Tu color de piel durante el invierno. Pueden ser lechoso blanco, semi-mate o mate.
• Tu color de piel cuando se broncea. Dorado, moreno claro, dorado moreno, oscuro o moreno oscuro.
• La aparición de ampollas, la duración de las mismas y en nivel de enrojecimiento cuando te expones al sol.

Fototipo I: tipo celta

Piel muy blanca, ojos claros y muchas pecas, además de ser muy sensibles. Entre sus características destaca:

• No se broncea nunca y siempre se quema.
• Con tan solo 12 minutos de exposición solar, la piel ya se enrojece
• Aparecen signos de envejecimiento temprano.
• Tendencia a desarrollar tumores benignos y engrosamiento de la piel.
• Factor de protección (FPS): 80 a 100.

Fototipo II: tipo germánico

Piel blanca, con ojos azules o verdes o pardos. La piel es un poco menos sensible y se caracteriza por:

• Generalmente se quema y es difícil que se broncee.
• Se empieza a enrojecer tras 15 minutos de exposición solar.
• Presenta signos de fotoenvejecimiento temprano.
• Factor de protección (FPS): 50 a 80.

Fototipo III: tipo caucásico

Piel con tendencia a ser grasa y clara, con ojos marrones o grises, siendo castaños o rubios. Sus características son:

• En ocasiones se quema, pero sí consigue broncearse.
• La piel se empieza a enrojecer a los 18 minutos de exposición.
• Ligera tendencia a que aparezcan manchas en la piel.
• Factor de protección (FPS): de 30 a 50.

Fototipo IV: razas mediterráneas

Piel oscura o mate, con ojos y pelo oscuros. Sus características son:

• Raramente se quema y se broncea con facilidad.
• En caso de quemarse, la piel se pone “morada”, pero no por mucho tiempo.
• Pueden aparecer manchas en la piel.
• Factor de protección (FPS): de 20 a 30.

Fototipo V: amerindias o mestizas

Piel oscura y mate, ojos oscuros y cabello muy oscuro o incluso negro. Se caracteriza por:

• Raramente se quema y se broncea con mucha facilidad.
• El enrojecimiento de la piel aparece tras unos 28 minutos de exposición solar.
• Facilidad para las manchas, con un envejecimiento de la piel tardío y leve.
• Factor de protección (FPS): de 15 a 20.

Fototipo VI: negra

Piel muy oscura o negra. Cabellos y ojos del mismo color. Se caracteriza por:

• La piel no se quema y se oscurece de manera uniforme.
• El enrojecimiento aparece tras 40-60 minutos de exposición.
• En ocasiones aparecen manchas.
• Factor de protección (FPS): 15.

Recuerda que para la crema sea adecuada, debe contener flitros, tanto para las radiaciones ultravioletas A (UVA) como ultravioleta B (UVB). Así que ya sabes, elige correctamente el factor de protección solar que necesita tu piel.

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No todas las personas necesitan el mismo protector solar, ni el mismo factor. Los niños, por ejemplo, cremas solares específicas para ellos, ya que su piel es más sensible que la de un adulto. El tono de nuestra piel, entre otras cosas, será un factor determinante para ayudarnos a elegirlo.

En el mercado encontramos un montón de protectores solares, aunque no todos ellos son igual de eficaces. Desde Mujeralia te ofrecemos los que, a nuestro juicio, son los mejores, toma nota:

• Clinique SPF 50 Body Cream. Esta importante marca de cosméticos no podía pasar desapercibida en este aspecto. Su alto factor de protección solar, junto a los antioxidante que le acompañan, la convierte en una de las cremas más eficientes contra los rayos dañinos del sol.
• Sun Tanning Lotion SPF 15. Aunque se trata de una protección media, está comprobado que es una crema que, además de hidratar, protege muy bien contra el sol incluso a las pieles más blancas. Resistente al agua, te protegerá también cuando estés en la piscina. Dentro de esa misma gama podrás encontrar SUN hydrating body lotion SPF30 con más protección.
• La Roche-Posay  Anthelios Crema Fundente 50+. Esta crema ha sido premiada en varias ocasiones por profesionales de belleza. Es en el mercado la que posee mayor protección solar en cuanto a rayos UVA.  Ideal para las pieles más blancas y sensibles, además de ser súper resistente al agua, aguantando incluso veinte minutos bajo la misma.
• Isdin 50+. Este fotoprotector es ideal para pieles sensibles o claras. Con una textura diferente que se extiende igual que un gel, pero hidrata como una crema, hace que sea una de nuestras favoritas. De rápida absorción la convierte en un protector idóneo para los días de playa.

Recuerda que tener un tono de piel moreno no implica no utilizar cremas solares. Y es que, los rayos UVA y UVB son igual de malos para cualquier tipo de piel. Escoge un fotoprotector adecuado a tus necesidades y recuerda repetir su aplicación cada dos horas.

Una piel bronceada es bonita, pero no debemos cometer atrocidades con el sol, ya que luego sufrimos sus consecuencias con manchas en la cara, por ejemplo o incluso cáncer de piel. Sin contar con el envejecimiento prematuro de la piel.

Así que si quieres conseguir un tono dorado bonito, te proponemos que siempre utilices protectores solares, aun cuando no estés tomando el sol, y eches un vistazo a esta dieta que te proponemos para potenciar el bronceado. Toma el sol siempre con cabeza, tu salud te lo agradecerá.

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